El enésimo recopilatorio de cuentos de terror publicado por la editorial Valdemar que leo. Y siempre acabo diciendo lo mismo, pero es que es absolutamente cierto. Se trata de pequeños volúmenes (libro de bolsillo), normalmente encuadernados en rústica, con cerca de mil páginas de buena literatura (lo cual los convierte en pequeños pero gruesos volúmenes), y, lo más importante, los mejores autores de todos los tiempos(sobre todo del siglo XIX, la era dorada del cuento de terror).
Porque, como siempre digo, lo mejor es la granada selección de autores: E.T.A. Hoffmann, Mary Shelley, Alejandro Dumas, Edgar Allan Poe, Nathaniel Hawthorne, Thomas Hardy, Ambrose Bierce, Bram Stoker, Guy de Maupassant, Stevenson, Pardo Bazán, Clarín, Conan Doyle, Rudyard Kipling, H.G. Wells entre otros aseguran que el pequeño tomo contiene la crème de la crème de esta literatura tan sugerente.
Otra cosa que me gusta de estas publicaciones es que los cuentos están ordenados por orden cronológico de sus autores, con lo cual se perciben los cambios estéticos y argumentales que iban variando con el paso de los años: de las prosas más barrocas y adjetivadas de Hoffmann o Shelley a las más rápidas y periodísticas de Kipling o Wells, por ejemplo.
Naturalmente hay altibajos en la calidad literaria, de lo primero que voy leyendo, por ejemplo, el relato de Alejandro Dumas (Historia de un muerto...) está a años luz de una rebuscada y excesiva en florituras Mary Shelley (El sueño). Ese es otro atractivo de estas antologías, poder apreciar la calidad excelsa sabiendo que todo es "caviar beluga".