lunes, 29 de agosto de 2016

Ahora leyendo: "Ropero de la infancia", por Patrick Modiano.

 No suelo leer literatura contemporánea, más que nada porque nunca sabe uno cuando un autor tiene mérito suficiente o es todo puro artificio editorial; tampoco valoro especialmente a aquellos escritores que han sido distinguidos con el Premio Nobel, por la misma razón. No obstante, aquí estoy con Patrick Modiano, regalo y recomendación de uno de los pocos familiares que todavía cuentan con mi cariño y consideración.
  Y, de hecho, como no me preocupo por los premios literarios y demás vanidades, solo conocía a este autor de oídas, lo cual, visto por otro lado, me permite ser más objetivo al juzgarlo. De primeras me ha recordado enormemente a Albert Camus, tanto por la forma aparentemente indiferente a la hora de narrar como por la ambientación en una mestiza ciudad norteafricana (presumiblemente Tánger) tan cercana al Orán de El extranjero.
 De momento poco más. Es una lectura sencilla, sin aparente complicación, una trama lineal con alguna analepsis y poquito más. Destaca la aparente pasividad de los personajes ante sus vivencias.
  En todo caso, la extrema sencillez de la prosa no auguraría el premio Nobel, pero ya se sabe... la literatura es también un arma nacional y todos los países (en este caso Francia) quieren enorgullecerse de tener un nacional con tan alta distinción.