martes, 15 de enero de 2013

Novela gráfica o cómic

  Alguno se sorprenderá. Pues que se "des-sorprenda"; esté género, subgénero o como quieran llamarlo los sabios creadores de toda teoría literaria (por cierto, en mi opinión otra entelequia humana como las grandes religiones), este tipo de literatura, digo, siempre ha sido considerado de segunda o tercera clase cuando directamente no ha sido considerado literatura; era demasiado fácil de leer, demasiado juvenil, demasiado... Pues se equivocan, la novela gráfica tiene el mismo valor si no más que la narrativa tradicional; lo tiene porque la trama se narra exactamente igual, pero es que, además, está dibujada como solo un artista puede hacerlo. La mayoría de los que desprecian la novela gráfica suelen ser esnobs que "presumen de lo que carecen": un nivel cultural que les capacite para entender la calidad allá donde se encuentre.
   Para los no iniciados, diré que los que clasifican este género (¡malditos críticos y clasificadores que todo lo han de mancillar!), dividen por continentes a los autores: americanos, que son, principalmente, aquellos de la factoría Marvel, esto es Spider-Man, Capitán América, Los Vengadores; japoneses, los conocidos Manga, que los ignorantes consideran que solo son cómics violentos y de alto contenido sexual; y los europeos, capitaneados por autores como Hergé, Tardi, Giardino... Para mi gusto, estos últimos son los mejores, pues sus temas son exactamente los mismos que los de cualquier otro subgénero de narrativa, no son los héroes ficticios de Marvel, que siempre me quedaron muy lejos.
   Americano es, sin embargo, Art Spiegelman (realmente nació en Suecia) pero por sus temas podría ser considerado europeo. Su novela gráfica Maus es, sin lugar a dudas, la mejor que he leído, una espeluznante narración sobre el Holocausto vivido en la persona de su padre, que no desmerece las narraciones de tantos autores de novela tradicional.
  Por otra parte, en la actualidad se están "pasando" a novela gráfica muchas obras claves de la literatura de todos los tiempos, véase la primera ilustración, que contribuyen a difundir más, si aún cabe, tales obras.