Creo que pocos episodios históricos son más rentables desde un punto de vista literario y artístico en general que la llegada del Tercer Reich y las convulsiones sociales y políticas que se produjeron en la Alemania de los años 20 y 30 del pasado siglo. El cómic de Jason Lutes (encuadernado de forma "aparentemente" lujosa para darle el prestigio adquirido con la nueva denominación, novela gráfica) se inspira en aquellas coordenadas espacio-temporales.
Este es el primer tomo de una pretendida trilogía, pero lo cierto es que los dos primeros volúmenes llevan varios años en el mercado y el tercero no ha aparecido y no se le espera en breve; tal vez es una obra demasiado ambiciosa o no ha cosechado el éxito que se anhelaba, vaya usted a saber.
En el primer tomo se presenta a Martha Müller, estudiante de arte proveniente de Colonia y a Kurt Severing, periodista. Ambos tienen una visión certera de la situación del país (casi parecieran omniscientes) y sufren en sus carnes ser disidentes del nacionalsocialismo que día tras día se va imponiendo, ya sea la disidencia por cuestión racial o de pensamiento. El dibujo, en blanco y negro, es del clásico estilo de "línea clara", con algunas viñetas dedicadas a calles y plazas de Berlín de una calidad francamente alta.
La trama tal vez sea un poco previsible, pero tiene suficiente mordiente para un cómic que, una vez más, demuestra que este subgénero literario es válido para temas serios e importantes.